Proceso para el ajuste de estatus: 5 minutos de lectura
La residencia permanente es el sueño de muchos extranjeros. Tener en sus manos una green card es la meta para la cual muchos dedican amplias carreras. Pero el camino no siempre es claro, y una visa temporal parece el escalón más alto al que tantos creen poder llegar. Para ellos, hay un mecanismo migratorio que les da esperanza: el ajuste de estatus.
El ajuste de estatus le permite a individuos que se encuentran en los Estados Unidos con una visa temporal alcanzar la residencia permanente. Es un proceso diseñado para asegurar que extranjeros elegibles puedan aplicar a una visa de inmigrante sin la necesidad de salir del país. A diferencia de un trámite consular, el ajuste de estatus es un proceso administrado por el Servicio de Inmigración y Ciudadanía de los Estados Unidos.
¿Qué es el ajuste de estatus?
El ajuste de estatus es un proceso que le permite a determinados ciudadanos no estadounidenses dentro de Estados Unidos solicitar la residencia permanente, también conocida como la green card, sin tener que salir del país.
Proceso del ajuste de estatus
Paso #1. Determina si aplicas a una visa de inmigrante.
Antes de comenzar el proceso, es fundamental determinar si cumples con los requisitos para aplicar a una visa de inmigrante. Evalúa tu elegibilidad según la categoría de visa a la que aspiras, ya sea a través de un empleador, de una inversión, de un familiar, entre otras opciones. Asegúrate de comprender completamente los criterios de elegibilidad y los documentos requeridos.
Paso #2. Presenta tu solicitud de una visa de inmigrante.
La mayoría de las personas que solicitan una tarjeta de residencia tienen que llenar al menos dos formularios: una petición de inmigrante y una solicitud de residencia. Por lo general, otra persona debe presentar las peticiones en su nombre aunque en algunos casos puede presentarla uno mismo.
Paso #3. Verifica la disponibilidad de visas.
Uno de los requerimientos del ajuste de estatus es la disponibilidad inmediata de una visa de inmigrante para el solicitante. La disponibilidad de visas puede variar según la categoría y tu país de origen. Es importante, por eso, estar pendiente de las fechas de prioridad actuales en el Boletín de Visas que el Departamento de Estado publica mensualmente.
Paso #4. Presenta el formulario I-485.
El formulario I-485 es la solicitud principal para el ajuste de estatus. Debes completarlo con precisión y enviarlo a USCIS junto con las tarifas y la documentación requerida. Así formalizas tu solicitud y colocas tu caso en el proceso de revisión.
Paso #5. Asiste a tu cita en el Centro de Apoyo de Solicitudes (ASC).
Una vez que hayas presentado el formulario I-485, USCIS te programará una cita en un Centro de Apoyo de Solicitudes (ASC) para tomar tus huellas dactilares y fotografías. Este paso es necesario para llevar a cabo una verificación de antecedentes y seguridad en tu proceso de solicitud.
Paso #6. Asiste a tu entrevista (si aplica).
En algunos casos, USCIS puede programar una entrevista personal como parte del proceso de ajuste de estatus. Durante esta entrevista, un oficial de inmigración te hará preguntas sobre tu solicitud y tu elegibilidad. Asegúrate de estar preparado: lleva contigo todos los documentos y evidencia relevante.
Paso #7. Responde a cualquier solicitud de evidencia adicional (si aplica).
Si USCIS necesita información adicional o documentación para procesar tu solicitud, te enviarán una solicitud de evidencia. Es importante responder de manera oportuna y completa a estas solicitudes para evitar retrasos en tu proceso.
Paso #8. Estate pendiente del estado de tu solicitud.
Durante todo el proceso, es importante estar al tanto del estado de tu solicitud. Puedes verificar en línea a través del sistema de seguimiento de casos de USCIS para obtener actualizaciones sobre tu caso. Mantén todos tus datos de contacto actualizados para que USCIS pueda comunicarse contigo si es necesario.
Paso #9. Recibe la decisión de tu solicitud.
Finalmente, una vez que USCIS haya revisado y procesado tu solicitud, recibirás una decisión. Esta puede ser una aprobación, una negación o, en algunos casos, una solicitud de evidencia adicional. Si tu solicitud es aprobada, estarás en camino hacia el ajuste de estatus y obtendrás el estatus de residente permanente en los Estados Unidos.
Aunque el ajuste de estatus es un proceso esperanzador para muchos, puede ser complejo y depender de las circunstancias particulares de cada individuo. Cuando a una persona le niegan su solicitud de ajuste de estatus, se revierte su estatus al que tenía originalmente: esto lo puede poner en riesgo de deportación. Así pues, el acompañamiento permanente de un abogado de inmigración y de un equipo especializado en procesos migratorios hacia los Estados Unidos siempre es aconsejable.
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